En el centro experimental que Biofarma puso en marcha hace algunos años a los efectos de Investigar, capacitar y mostrar un modo de producción de alta eficiencia, amigable con el medio ambiente y con sustentabilidad energética se incluyeron cañones aspersores para bajar el estrés calórico del ganado.
En 2021, a unos 15 kilómetros de Jesús María, en el norte cordobés, la empresa Biofarma puso en marcha el denominado Centro Experimental de Nutrición Animal de Biofarmam (CENAB) a los efectos de plasmar tres actividades: la investigación, la producción y la capacitación.
El objetivo de este emprendimiento es “tener la posibilidad de contar, en un mismo espacio, con las herramientas necesarias para llevar adelante diversas investigaciones que permitan validar conceptos obtenidos en el exterior, aplicados a condiciones climáticas particulares -que ofrece la provincia de Córdoba-, con la utilización de productos determinados y validados por un sistema de gestión de calidad, y bajo un engranaje que incluye no sólo la comercialización de animales de primer nivel, sino que también combina sustentabilidad energética y profesionalización del sector, a escala nacional e internacional”, señala un artículo publicado por el portal Motivar.
Ante los intensos calores Biofarma montó en el CENAB, una red de cañones aspersores, los cuales son encendidos rutinariamente en las horas de mayor calor, “con los que refrescamos a los animales mediante mojado, y bajamos la temperatura del suelo del corral”, señalan desde la empresa.
Los aspersores tienen un alcance de 26 metros, con un tamaño de la gota mayor a 150 micrones y un diámetro de mojado de 52 metros. Los ciclos de aspersión son de 12 minutos por 78 minutos de apagado, y se concretan en la franja horaria que va de las 10.30 a las 15.30 horas.
FUENTE:
www.todoagro.com.ar