La carne de cordero es una opción gastronómica exquisita que ha conquistado los paladares de muchas culturas a lo largo de la historia. Además de su sabor distintivo, este alimento ofrece una serie de beneficios que vale la pena conocer.

• Sabor único y versátil: que se describe como suave, tierno y ligeramente dulce. Esta combinación de sabores le permite ser el protagonista de una amplia variedad de recetas culinarias, desde asados tradicionales hasta guisos y platos de inspiración mediterránea.
• Fuente de proteínas y nutrientes: esenciales para el crecimiento y mantenimiento de los tejidos del cuerpo. Además, contiene una amplia gama de nutrientes, como hierro, zinc, vitamina B12, selenio y niacina, que son fundamentales para el correcto funcionamiento del organismo.
• Grasas saludables: también es una buena fuente de grasas saludables, como el ácido linoleico conjugado (CLA), que se ha asociado con beneficios para la salud cardiovascular y la reducción de la inflamación.
• Facilidad de digestión: debido a su textura tierna y baja cantidad de colágeno. Esto la convierte en una opción ideal para personas con sensibilidades digestivas o problemas gastrointestinales.
• Sostenibilidad: es una carne proveniente de animales pequeños y se caracteriza por tener una huella de carbono menor en comparación con otras carnes.

Aunque la carne de cordero tiene muchos beneficios nutricionales, es importante disfrutarla con moderación como parte de una dieta equilibrada. Optar por fuentes de carne sostenible y criada de manera responsable también es fundamental para asegurar un impacto positivo en el medio ambiente.

Por tal motivo, en Estancias Ferguson incorporamos una política corporativa enfocada en la sustentabilidad, la huella hídrica y la producción con energías renovables y alternativas.